El
acceso al alma (Cinco mensajes de como canalización)
El acceso al alma no es complicado, es si A través de estos cinco
breves mensajes voy a intentar crear un esbozo de cómo es la canalización.
A través de la canalización podemos acceder a nuestro Yo Superior,
podemos encontrar sentido en nuestra vida, encontrar a aquellos seres que nos
acompañan en este viaje, y podemos recibir su abrazo y reconocerlo.
LA CANALIZACIÓN I:
EL ALMA
Normalmente hay varias fases en la canalización según cuan profundo
es el trabajo del canalizador, pero también hay personas, que por su trabajo
espiritual se saltan unas fases para llegar a lo que de verdad es la misión de
su vida, como por ejemplo los sanadores, que canalizan energía pero no
canalizan a sus guías.
Canalizar no es sólo encontrar respuestas, sobre todo es
encontrarnos a nosotros mismos. Es así,
también debemos canalizar nuestro propio ser y nuestra propia energía. Lo que
hace que esta vida sea tan complicada es la falta de luz sobre ella, es pues
necesario abrir nuestro corazón para que la vida sea VIDA y el amor sea AMOR.
Y esto no es complicado, no tanto como esperamos, ser felices es una elección
de vivir en afinidad con la vida y no en su contra.
Cuando empezamos a canalizar, lo más importante es buscar una
puerta hacía su alma. No podemos adentrarnos en un mundo desconocido donde los
pensamientos se hacen reales y donde las emociones cobran consciencia si no
accedemos con un corazón libre de impurezas, y ese es el alma. Aquellas personas
que se adentran con el ego a otros planos superiores de consciencia no acceden fácilmente
a seres de luz, se encuentran con su propio ego reflejado en otros seres o
consciencias.
Una vez en el nivel de consciencia de nuestra alma podemos
adentrarnos a planos superiores. El alma tiene contacto con nuestro guía, tiene
acceso al Yo Superior, tiene consciencia de si misma y de la vida. El alma es
un niño con un corazón inmenso y es aquella parte divina más accesible que
tenemos. No podemos darle la espalda, no podemos negarle el lugar más
importante de nuestro ser, pues el alma es el Yo más íntimo que podemos
imaginar en esta vida. Más allá, en un nivel más alto, se encuentra el Yo
Superior, pero también más difícil de sentir desde nuestra consciencia.
Cuando se canaliza, la persona tiene acceso a su Yo Almico, y desde
él puede escuchar a su propio guía, a seres de luz o incluso a su Yo Superior,
un ego nunca podría hablar con el Yo Superior, es necesario acceder al alma
para poder subir de nivel. No hablo del espíritu o la energía, si no de la
consciencia. Nosotros, el yo racional y mental, no puede tener acceso a
realidades más elevadas. Allá donde hay el ego no deja paso al corazón no puede
haber luz. Se necesita acceder al alma.
¿Cómo logramos este primer paso en la canalización? simplemente un
juego. Nuestra alma reconoce la alegría y se experimenta en ella, nuestra alma
reconoce nuestro entusiasmo y se vive en él. No tenemos que entender que es la
consciencia la que accede al alma, aunque desde nuestro punto de vista lo
parezca, en verdad es el alma la que juega en nuestra realidad. Cuando
cantamos, cuando creamos, cuando sonreímos, cuando amamos, estamos abriendo una
puerta a nuestra alma. Bloquear la inocencia es sinónimo de bloquear el
espíritu de la vida. El alma sólo se manifiesta allá donde se reconoce, allá
donde hay amor, donde hay luz, vida alegría, juego… no puede manifestarse allá
donde hay egoísmo, ni rabia, ni ira. Aquello no es el alma, y aquel que intente
acceder a planos de conciencia desde este punto no encontrará luz, pues no es
el alma quien accede.
Es pues, necesario pararse, sentir, abrir paso al amor que en
nosotros habita, abrir el corazón y la luz que en nosotros habita, y así dar
cabida en nuestro presente a la verdadera realidad. Sólo desde este lugar
empieza el verdadero camino hacia nuestro Yo Superior. Sólo con el corazón
podemos encontrar el camino de regreso a casa.
LA CANALIZACION II:
AQUELLO QUE NO
NOS DEJA VER
El alma sólo podemos acceder con una intención limpia. No se pude
acceder a un trabajo puro con una mente espesa o con unas intenciones egóicas.
Ya sabemos que al ego sólo puede hablarle otro ego pues sólo escuchará a un
ego, y a la razón sólo puede hablarle otra razón porque no entiende más que de
razonamientos. Nuestra alma es un ángel, y un ser angélico no razona, no entra
en esos juegos de la mente ni del ego.
Primero hay que dejar atrás todo lo superfluo. Hay que limpiar
aquello que estorba. Este camino sólo puede terminarse con un corazón limpio de
impurezas, por ello, necesitamos liberarnos de tanta paja.
Es verdad que podemos acceder a estados internos muy altos sin
limpiar totalmente nuestro ego, eso son aquellas pequeñas experiencias místicas
que a veces tenemos. Pero en realidad son una ventana que nos abren los guías
para que veamos cuanta luz y cuanto amor nos aguarda si decidimos continuar el
viaje.
Para liberarse de todo aquello que nos sobra no hace falta más que
la intención. Es necesario diferenciar entre aquello que nos alimenta y lo que
no, aquello que es pasión y enturbia nuestra razón y aquello que es amor y
aclara nuestros sentidos, aquello que es humildad y nos acerca a los que nos
rodean y aquello que es “pena” nacida del orgullo y del ego que juzga a
nuestros hermanos. Esta en nuestra mano elegir y todos tenemos la oportunidad
de hacerlo. Nunca es tarde para decir: “Este que actúa así no soy yo. Yo soy
aquel que es consciente de que este es sólo un papel en la gran obra de la
vida, yo soy el alma que habita dormida mientras lo temporal cree ser eterno.
Yo soy lo atemporal y por ello, esta actitud completamente efímera que ahora
manifiesto, no soy yo, y no me reconozco en ella. Pues yo soy amor, yo soy
luz”. Esta frase es sólo una frase, no es más valida que otras. Es
el significado lo importante, en el momento que alguien es consciente de que
aquello no es él comienza un trabajo que sólo durará unas pocas fases antes de
concluir. En el momento que alguien dice que “no” a una conducta que suele
manifestar, o un patrón de conducta, comienzan una fase mucho más sencilla, en
la que se repetirá aquella conducta y la persona ha de ser capaz de corregir
antes o durante dura lo que ha ocurrido. De nada sirve hacer algo y luego
arrepentirse, debemos modificar nuestra conducta en el mismo momento porque si
no aparecerán sucesos una y otra vez que nos hagan participar egóicamente según
nuestro patrón de conducta hasta que seamos capaces de corregir nuestra acción.
No estoy diciendo que esto haya que hacerlo antes de canalizar,
esto es un trabajo de toda una vida y es la intención la que muchas veces nos
abre las puertas a otra realidad. Pero tampoco podemos creer que trascendido a
nuestro ego cuando no hemos hecho más que empezar el camino.
Existen 4 cualidades a trabajar en nosotros, 4 escalones para
liberarnos de lo superfluo:
la humildad, la carencia de deseos, el amor, y el
discernimiento.
Estas cualidades debemos manifestarlas en todo momento mientras
accedemos a otros estados e consciencia, pero sobre todo aquellas personas
dedicadas a la canalización han de tenerlas muy en cuenta pues los mensajes que
reciben irán a parar a otras personas que no tienen porque ser conscientes de
que los mensajes pueden estar transformados por el ego, por los deseos o por el
juicio y raciocinio de quien canaliza cuando el estado en el canal no es
adecuado.
Cuando una persona accede a mundos paralelos a través de la razón y
del ego podemos ver que obtiene respuestas, muchas veces validas, pero esas
respuestas no ayudan al crecimiento de la persona, no ayudan a despertar.
Pueden encontrar respuestas, si. A veces acceden a “poderes” ocultos como la
clarividencia, la telepatía, pueden obtener mensajes sobre el futuro de alguna
persona. Pero eso no es luz en el camino hacia el hogar, eso es luz en una vida
superflua. En estos casos, tanto el consultante como el canal son participes de
este error, los dos buscan en lugares equivocados. Cuando una persona consulta
a un canal debe tener en cuenta que tipo de seres quiere que le contesten y en
afinidad a esto preguntar una cosa u otra. Es necesario discernir.
Lo mismo el canal debe aprender a decir que no a algunas consultas
pues el está atrayendo hacia sí seres de planos poco elevados. No son ángeles
aquellos que nos hablan de nuestros vecinos, de nuestro futuro o de lecciones
de vida para el ego.
LA CANALIZACIÓN III:
ACCEDIENDO AL
ALMA, UN ESTADO SUPERIOR DE CONSCIENCIA
Para acceder al alma solo es necesario alejar las dudas y no buscar
resultados. El alma es un niño que juega, debemos dejarla jugar. No pensemos
que comportarnos como un niño nos hará estar más cerca de ese estado, puede ser
un espejismo del ego el que busca “aparentar” ser como un niño, como un rol que
manifiesta nuestra personalidad para ganar confianza y cariño de los demás. El niño interno es un ángel, es todo luz y
amor.
Podemos acceder a él en cualquier momento del día siempre
despejando nuestra mente.
Cómo técnica más válida aconsejo la creatividad. El niño interno es
el ser creativo que manifestamos. Es por ello que muchas personas aseguran que
su profesión es creativa cuando realizan tareas como planchar o lavar ropa, o
la informática o incluso la contabilidad, y claro que son tareas creativas en
cuanto dejan paso a su niño interno y le hacen partícipe sus acciones. El niño
interno convierte su trabajo en un juego logrando que aquello tedioso y
aburrido se pueda convertir en una tarea hermosa y gratificante.
Para canalizar hay que dejar paso al ser creativo que llevamos
dentro. A través de la alegría, de la paz interna, del amor. Nuestro niño
interno no está enfadado nunca, no entiende lo que eso significa y no tiene
enemigos, tampoco distingue entre los bueno y lo malo, eso lo hace la razón.
Aquello que juzga o discrimina es nuestro pensamiento. Para el niño interno
nada nos puede dañar porque aquello que nos hace daño, realmente está dañando
nuestro orgullo, y no nuestro corazón.
Para entrar en contacto con nuestra alma hay un ejercicio muy
hermoso y sencillo: Respirar tres veces y sonreír.
1 … 2 … 3
Hola hermosa alma, eres un ángel tiernamente amado por todo e
universo. Gracias por vivir a través de las dudas y asomarte para bendecir este
momento. Se consciente de que tú eres tu propia alma. Que el juicio y la falta
de luz no te niegue el derecho a saber quién eres de verdad: tú eres amor.
Gracias
LA CANALIZACIÓN IV:
ACCEDIENDO A
NUESTRO YO SUPERIOR
Nuestro Yo Superior, con ese nombre, ya suena que esta demasiado
lejos para nosotros, ¿verdad? Algunos se pasan toda la vida pensando que ese
ser es otro, uno muy grande inmenso, diferente completamente a nosotros,
inaccesible. Pero olvidamos de que esto son solo palabras, definiciones. En
realidad el nombre viene porque es un estado “superior” de conciencia, no
porque sea tan enorme. Su magnitud energética, su amor, su corazón, puede
dejarnos paralizados al descubrir que en nosotros habita algo tan hermoso, pero
así es. Ese ser es nosotros mismos y podemos llegar a ser conscientes de esto.
Siempre he imaginado a mi Yo Superior como alguien muy serio, sin embargo la
seriedad es algo mental, es algo de nuestro plano. La seriedad sí que no
existe, pero el Yo Superior sí.
Cuando nuestro ego no nos permite acceder a tal estado de consciencia
entonces accedemos a nuestro guía quien nos trae los mensajes de nuestro Yo
Superior, o nuestra propia alma de una forma inconsciente muchas veces. Nuestro
Yo Superior tiene mensajes que darnos, sí, pero esos mensajes siempre nos
llegan, en realidad los conocemos ya, no necesitamos preguntárselos a nuestro
guía. Cuando nos llegan esas palabras sentimos que siempre las conocimos, que
estuvieron con nosotros en cada paso que dimos. A veces las palabras son:
Sigue tu camino ángel mío, eres tiernamente amado y
conoces exactamente donde están las respuestas para ser feliz y conducir tu
vida hacia tu propio destino.
Otras nos hablan de la misión de vida:
Despierta a tus pasiones, tú vales mucho más que todo
esto y puedes verme y ser consciente de este momento. Despierta porque es
momento de que trabajes en ti mismo. Estoy en cada partícula de ti y puedes
actuar sabiendo esto. No confundirás el camino porque yo estoy contigo.
Otras nos hablan del tiempo:
Sólo existe este momento, lo demás se lo inventó el ego
para hacerte creer que no vales nada. Tú eres AHORA.
Es hermoso leer estos mensajes, tanto los que van a nosotros como
aquellos que van a otras personas. He visto multitud de veces como los maestros
nos llaman a través de pequeñas señales como una hora en particular, que se repite
en cientos de personas a la) recordándonos que nosotros somos ese Yo Superior,
nosotros somos el Yo y nos laman a la Unidad. Otras veces esos mensajes tan
sencillos son simplemente un 144
recordándonos que nuestra verdadera familia de luz esta en nuestro corazón,
llamándonos para que seamos conscientes de que estamos aquí con ellos y por
ellos. No estamos solos pues toda una hueste de ángeles nos acompaña, son
nuestros amados amigos, son de nuestra familia y nos muestran que ahí están con
señales tan sencillas como un sencillo número (144) que se repite en nuestro
día a día.
Nos piden que conectemos, que seamos conscientes de nosotros mismos
y conectemos con nuestro verdadero Yo. Y lo piden porque somos capaces de
hacerlo, es nuestro papel y es el camino más fácil para recordar nuestro papel
en esta historia.
LA CANALIZACIÓN V:
TÉCNICA DE
ACCEDER A NUESTRO YO SUPERIOR
Existe una única forma de acceder al Yo Superior y es a través de
una intención clara y limpia de todo propósito más que el SER.
Una vez en un estado de conciencia álmico, limpios de otra
intención que no sea más que amar, jugar, dar, aparece el camino de continuar
en ese estado o decidir abrir nuestro corazón. Tenemos la llave y sólo con la
intención podemos hacerlo.
Existen múltiples técnicas que a lo largo de la historia nos han
conducido a estados muy elevados de consciencia pero todas ellas se basan en
esto, en la intención.
Cuando accedemos al verdadero corazón encontraremos una paz
increíble. Una tranquilidad de saber que estamos en el momento adecuado y en el
lugar adecuado. Seremos conscientes de nosotros y de nuestro entorno pero no
nos preocuparemos lo más mínimo de lo que ocurra pues trascenderemos a nuestro
lugar terrenal. Nuestro corazón trascenderá. Habrá personas que tendrán
desvelos, habrá otras que sentirán la vuelta al hogar, habrá otras que
simplemente sentirán seguridad en sí mismas, pero en general, todas sabrán que
son ellas mismas, serán conscientes de esto. Parece una bobada pero normalmente
no somos conscientes de nosotros. Somos conscientes de lo que nos rodea pero no
de nosotros mismos.
Nuestro Yo Superior es una puerta a otros planos ascendidos. A
nuestros recuerdos de otras vidas, a nuestra verdadera misión. Agradecer ese estado
es una forma de mantenerlo pues la gratitud nos permite aceptar el momento y
amarlo. Aceptamos aquello que sabemos que está dispuesto desde un orden
superior, y lo aceptamos no con resignación, si no con humildad y amor hacia su
creador.
Cuando centramos nuestra atención en el corazón desde una
conciencia alterada ligeramente superior y decidimos abrir el corazón
completamente nos podemos encontrar con la verdadera razón de nuestra
existencia. Habrá personas que no puedan abrir los ojos en este estado, no
puedan ver con el corazón, pues no están trabajando el verdadero amor. Sólo el
amor da luz en este estado.
Tampoco hay que preocuparse si no vemos nada, si nos sentimos en la
penumbra, pues eso nos indica qué es aquello que tenemos que trabajar. Nosotros
somos amor, si no vemos es porque aun no nos han enseñado a manifestarlo. Pero
podemos aprender y en eso estamos, ¿no?
Es pues oportuno mencionar que la puerta que abre todas las puertas
es la vibración del amor, la intención nos guía hasta estas puertas pero sólo
esa vibración nos ayudará a entrar. Esa vibración podemos forzarla, pero sólo
cuando estamos en consonancia con ella abrirá nuestro sagrado espacio divino.
El mantra sagrado resonará entonces en toda la entrada y podremos ver la
claridad de nuestro verdadero hogar, "
EL CORAZÓN"
Besos desde lo más profundo de mi corazón...
Que Dios
los bendiga...!!!
....Namaste...María
Eugenia.