Despertar a la belleza, a la magnificencia y a la maravilla de la Realidad te transportará a un estado de absoluta Alegría actualmente inimaginable, el cual es tu herencia y tu destino. Aquí en los Reinos Espirituales esperamos con expectativa y con siempre creciente deleite, mientras observamos vuestro continuo progreso hacia el momento de vuestro despertar, sabiendo qué maravillosa y sobrecogedora sorpresa os embargará, cuando vuestra consciencia se abra expansivamente para interiorizar y regocijaros en la inmensidad del Amor de Dios por vosotros. Lo que nuestro Padre ha preparado para vosotros; y consecuentemente para todos nosotros, para toda la Creación, está absolutamente más allá de las palabras, de las imágenes y de las descripciones; y tiene que ser experimentado conscientemente por un Ser totalmente despierto; y pronto todos estaréis totalmente despiertos y totalmente conscientes, disfrutando la maravilla infinita que es Dios. Verdaderamente podéis no tener ni idea de lo que os va a recibir cuando abráis vuestros corazones para aceptar y recibir el regalo eterno que Dios os da.
Si alguno de vosotros piensa que este mensaje del Amor infinito de Dios por vosotros, ofrecido y entregado a través de Mí a través de todos los santos aquí en los Reinos Espirituales por medio de este canal, es demasiado bueno para ser verdad, que es irreal, el iluso sueño de un anciano excéntrico, entonces Yo os puedo asegurar absolutamente que la maravilla de lo que estáis a punto de experimentar - LA REALIDAD - poderosamente hará desaparecer cualquier duda, incredulidad, mal humor o recuerdo infeliz que las experiencias dentro de la ilusión hayan estimulado y sustentado.
Como os ha sido dicho repetidamente: "¡No habrá decepciones!" ¿Por qué? Porque nuestro Divino Padre siempre provee. Él os Ama a todos, sin excepción y sin reservas; y Su Voluntad para vosotros es infinita alegría; y Su Voluntad prevalece siempre. No hay oposición ni alternativa a Su Voluntad, nunca ha habido, nunca habrá ni nunca podrá haber, porque Él es Todo, no hay nada más; y consecuentemente todos vosotros sois partes o aspectos esenciales de ese Todo, eternamente inseparables de Él, tal como Él os creó.
El estado de ilusoria irrealidad que construisteis, aparentemente hace infinitamente muchísimos eones, se está disolviendo. No es más que un pensamiento tenue, brumoso, vaporoso, con el cual una vez os involucrasteis erróneamente; y en un momento se habrá ido dejándoos libres para comprometeros totalmente con la sublime y siempre creciente Realidad que es Dios, Todo Lo Que Existe; del cual nunca habéis estado separados. Vuestra percepción de vosotros mismos como miles de millones de pequeños seres insignificantes errando a la deriva, solos, abandonados; y sin ninguna consecuencia en un vasto, amenazante y completamente inconsciente Universo, se está disipando mientras se fortalece y se intensifica vuestra intención colectiva de despertar.
Estáis llegando al Hogar. No hay nada en vuestro camino; y como os hemos recordado frecuentemente, vuestra gloriosa llegada es inevitable. Regocijaos en este Día de Navidad celebrando el aniversario de mi nacimiento en la ilusión, el cual sucedió como una parte del Plan Divino, para conduciros a todos de regreso a un estado de consciencia totalmente despierto, en el cual podéis disfrutar eternamente las maravillas que nuestro Padre ha creado para todos nosotros, simplemente porque nos ama más allá de lo que cualquiera de nosotros puede imaginar, porque es solamente siendo Uno con Él como podemos experimentar e involucrarnos con la Realidad, nuestro verdadero y único Hogar.
A muchos os parece que habéis estado interminablemente embebidos en un Universo que se expande continuamente mientras continúa tratando de convenceros de que sois pequeños e insignificantes jugadores en un ambiente que ha llegado a la existencia como resultado de una ocurrencia impredecible, altamente improbable y aleatoria, para la cual nunca puede haber una explicación satisfactoria. Consecuentemente regocijaos al estar cada vez más conscientes de que tan vasto y complejo estado nunca podría haber ocurrido aleatoriamente, que de hecho una increíblemente compleja y poderosa inteligencia - TÚ, el hijo Uno de Dios - lo construyó, entró en él, os escindió en miles de millones de seres separados; y os perdisteis allí como en un enorme laberinto.
A lo largo de los eones muchos han venido a mostraros la salida; y lentamente habéis llegado a aceptar la guía y la ayuda amorosas que os han ofrecido, cualquiera que haya sido vuestra cultura, raza o creencia atea o religiosa. Ahora estáis avanzando rápidamente hacia el momento de vuestro despertar de la ilusión; y muchos ya lo estáis sintiendo muy fuertemente porque está muy cerca. Continuad teniendo la intención de ser solamente amorosos, de compartir ese Amor incondicionalmente como lo hace vuestro Padre Celestial; y con absoluta certeza sabed que pronto (¡Sí, esa palabra otra vez!) despertaréis, como fue divinamente prometido en el momento en que tuvisteis los primeros pensamientos de separación de vuestra Fuente.
Vuestro amoroso hermano, Jesús.