A partir del pasado 21 de diciembre y hasta el domingo de pascuas
(20 de abril), se gesta en la Tierra y en todos los terrestres, una
energía completamente renovadora y oportunista. En algunas partes del
mundo se le llama espíritu navideño (por que contiene la navidad, sólo
que olvidan su continuidad hasta semana santa); pero lo cierto es que
nadie puede negar que en estas fechas, en todos los días que comprenden
ese período de 120 días, la Energía Crística hace estragos en nosotros... y cada año es más fuerte que el anterior.
Podrás darte cuenta, en la calle, en el trabajo; incluso en tu hogar,
cómo todos nos ponemos alterados en algún sentido. Por momentos logramos
estar alegres, especialmente cuando permitimos en nosotros recibir y
dar amor en un abrazo al tocar las doce, o en las despedidas de año
cuando nos permitimos ver con un cristal diferente a los compañeros de
trabajo que nos hacen la vida difícil en todo el año que se acaba (sin
darnos cuenta que el año siguiente todo será igual si no modificamos
algo). Pero lo que más abunda es nerviosismo, molestia y hastío.
Sentimientos encontrados de soledad, resentimiento, amor, perdón,
complacencia y resequedad nos agobian en estos días. Incluso hay
muchísima gente que quisiera pasarse por alto estas fechas con tal de
evitar todos esos sentimientos azotando sus corazones.
Lo cierto es que si pudiéramos en estos momentos ser conscientes de lo que sucede, el sufrimiento y la molestia quedarían eliminados. Por ejemplo, si pudieras por un momento encontrar en los ojos de quien te molesta todo el año, la verdadera razón por la que el universo lo puso a tu lado, el aprendizaje se haría luz en tu mente, entonces ya no te quedaría más sentimiento en tu corazón que el agradecimiento y el perdón. Comprenderías de pronto que nadie quiere hacerte daño en verdad, sólo existe una lucha interna continua en todos los seres humanos, que se expresa en la lucha de clases, de jerarquías y sexos. En eso se resume la miseria del ser humano dormido en consciencia. Esa misma dormidera es la que nos hace estar molestos continuamente y especialmente en estas fechas en las que las energías tan fuertes que ingresan en nuestro sistema planetario nos invitan a concientizarnos de ello.
Entonces, vamos a agregar un poco de información a todo esto para que logres darte cuenta de lo que se mueve:
*Árbol de Navidad: Representa nuestra propia estructura psíquica. Fíjate cómo armas tu árbol de navidad. Si le pones demasiado ornamento, si es exactamente igual cada año, si ni siquiera lo armas... todo tiene un significado.
*Papá Noel: si bien es un invento comercial, sabemos que las mentes finitas reciben información del infinito (especialmente a personas que son capaces de mover grandes masas de gente). Los colores del traje de Papá Noel en rojo y blanco significan un nuevo nacimiento. El rojo, el color de la sangre significa la llegada a la vida física y el blanco es la luz de la cual se proviene. Ambas cualidades son propias del nacimiento; que en definitiva es lo que se celebra: el nacimiento del Cristo. Incluso en este personaje se juntan dos recuerdos de la historia de la humanidad, bien diferentes: uno es el nacimiento del Cristo y las ofrendas que éste recibe y otro es el de San Nicolás que era un anciano del Norte del mundo que se dedicaba a obsequiar regalos a los niños del pueblo en el que vivía.
*Reyes Magos: los tres reyes no eran más que Sabios de oriente que venían a cuidar de Jesús para que sea cumplida la tarea de impregnar a la humanidad de la Energía del Cristo que él mismo traía en carne. Ellos personifican a todos nosotros cuando recordamos al Cristo y cuando le ofrendamos nuestra creencia, todo el año.
*Miércoles de Ceniza: (en carnaval para nosotros) Es el
comienzo de la Cuaresma. En ese día se "empieza" a hacer honor al
Cristo que irá a la Cruz... seguimos con la misma energía!
*Semana Santa: se celebra el "trabajo de Jesús" como enviado de Dios encarnando al Cristo.
*Pascuas: (también es el domingo de Resurrección) En este día TODOS
deberíamos resucitar... En Uruguay no hay quien no diga que el año
empieza después de Turismo (semana santa) ¿acaso esa frase no trae
oculta la verdad de la que estoy comentando hace rato?
Los
invito a todos quienes lean estas palabras, que se den la oportunidad de
sentir esa energía de cambio y verdad que llega a nosotros. Sean
Honestos con ustedes mismos, ese es el mejor regalo que pueden hacerle a
su presencia y a todos quienes les rodean: si no quieren estar en un
lugar con determinadas personas, pues no vayan. Sean honestos. Si de
todas formas van, por favor, regálense la oportunidad de sanar. Traten
de entender y sanar los rencores. Reciban en su corazón la energía del
perdón y así sí será bien recibida la Navidad!
Pau.
https://www.facebook.com/duendes.avalon
