Canalizado por: Jean Luc Ayoun
Transcripción: Véronique Loriot
Traducción: Susana Milán.
BIDI 19 octubre 2012
Y bien, BIDI está con vosotros. Os saludo y vamos a
dialogar. Os escucho.
Pregunta: ¿por qué
siento siempre como una agresión en vuestra expresión?
Porque en ti hay una necesidad de comprender y,
como he dicho, lo que yo expreso no hay que comprenderlo. Te propongo entonces,
dormirte completamente: es la única forma que lo que queda de personalidad, no
pueda hacerte reaccionar. La vibración de mi voz abre algunas puertas y como muchos
han constatado, lo que es esencial en el tiempo de la escucha, no es una
comprensión. Te recuerdo que tú no puedes comprender lo que Eres. Así lo que se
opone a lo que tú Eres, a nivel de la persona, puede traducirse por una cólera,
un rechazo, una negación o, como tú dices, una risa nerviosa. Pasado ese
estado, desde el instante en que hay una forma de aclimatación a lo que yo
expreso, en ese momento, puede realizarse lo que debe realizarse, en ti. No
olvides que el Amor, que vosotros llamáis Vibral, no se dirige a los
sentimientos humanos y, aun menos, a la persona sino a lo que está detrás de la
persona. ¿Acaso el espectador que mira la a escena de teatro va a ir a ver a un
actor para preguntarle cómo habla? La mejor forma de darse cuenta de la escena de
teatro y del espectador, es por tanto salir del teatro. Esos mecanismos se
desarrollan exactamente, en el Interior de vosotros. Ya he expresado que
adormecimientos es la prueba de lo que ocurre. Calificar el amor (a través de
una voz, a través de una actitud, a través de una seducción) es lo propio de
las personas. Superar la persona, es no jugar más a esos juegos. Mientras estés
sujeto o sometido a cualquier reactividad, lo que se expresará será siempre la
persona. Es por eso que yo he manifestado que el hecho de dormirse era
ciertamente, la mejor forma de acercarse a lo que tú Eres. Así pues, en lugar
de plantearte la cuestión de mi voz, pregúntate lo que ríe, en ti. ¿Quién
duerme? ¿Quién está medio presente? Observa realmente lo que emerge en ese momento,
y tendrás tus propias respuestas. Lo que expresas revela una forma de atadura
moderada a los modos de expresión, a las intenciones, a los comportamientos que
tú traduces a través del filtro de tu persona, como amor o como otra cosa. Pero
el Amor Vibral no es eso. El Absoluto aun menos.
Pregunta: ¿si
aconsejáis dormir, por qué demandáis entonces cuestiones?
Siempre están los que no duermen. Porque si
durmierais todo, la Ilusión no existiría más. Lo que yo llamo sueño, es lo que
os permite precisamente, comprender que lo que Sois no es nada de lo que
vigila, no es nada de lo que se expresa y nada de lo que pasa. Cuando dormís
(aparte de los sueños y las pesadillas) ¿os acordáis que habéis dormido,
exceptuado mirar el reloj? ¿Qué pasa durante ese tiempo? Y bien, el mundo no
existía ya, para vosotros: nada de marido, ni de mujer, ni de niños, ninguna
preocupación. Y sin embargo ¿habéis desaparecido? Lo que ha desaparecido, es el
mundo. No vosotros. El sueño es un medio, por ejemplo, de acercarse a lo que tú
Eres. Preciso, como he tenido muchas veces la ocasión de decirlo, aquí como en
mi casa, cuando yo recibía individuos: los momentos más intensos eran aquellos
en que no había ni pregunta ni respuesta. Como una suspensión del tiempo, en el
sueño. Y cuando llegamos todos, a dormir, todo estaba transformado. Así que
podéis calificar esto: podéis llamarlo la Gracia, el Espíritu Santo, la Unidad,
el Absoluto. Poco importa. Lo que observáis, es que hay en la desaparición de
la conciencia, un mecanismo fundamental. Porque, cuando vuelve la conciencia, a
través de los silencios, entonces sois diferentes. De igual forma que cuando
dormís, esto pone fin, en general, a la fatiga del cuerpo, por la noche. Y sin
embargo estabais ausentes de ese cuerpo. Esto para mostraros y haceros vivir
que, desde el instante en que paráis de hacer jugar a la persona, desde el
instante en que se oculta, entonces todo solo puede ir perfectamente bien.
Acordaros que lo que hace mal, será siempre la persona, o la interacción de las
personas. El Amor no es una interacción, el Absoluto aun menos. He aquí por qué
hablo del sueño. Como he dicho también, y lo repito hoy: el impacto de mi voz
se hace sobre una de las bolsas sutiles que vosotros denomináis cuerpo causal.
Relaja de alguna forma, los lazos que mantenéis con la persona que creéis ser.
Por supuesto, la persona se rebela: puede encontrar mi voz desagradable, puede
encontrar que digo barbaridades. Cualquier persona tendrá siempre razón frente
a mí. Porque yo me dirijo a lo que hay detrás o delante de la persona.
Pregunta: ¿pasar de
la personalidad o del Sí, al Absoluto, resulta de un contrato del alma o es
independiente de lo que somos en esta vida?
El contrato del alma solo concierne al alma. El
alma no puede ser Absoluto. El alma es efímera, en otra escala de tiempo que la
persona. El Absoluto no es un fin que conquistar, ni un paso. No se puede pasar
de la persona al Absoluto y, aun menos, del Sí al Absoluto. Solo en el Abandono
a la Luz y en el Abandono de Sí, el Absoluto Es. Tu punto de vista es falso. El
Absoluto es tu naturaleza, mucho antes de la encarnación, mucho antes de la
falsificación, mucho antes de los juegos de sombra y Luz. Mientras que tú
consideres que el Absoluto es un paso, una continuidad, un contrato, o algo que
depende de otra cosa, te equivocas. Es siempre la persona (instalada incluso en
el Sí) la que te hace creer que el Absoluto es un fin, que hay una distancia,
que hay algo lejos, que adquirir. Tú no puedes adquirir lo que tú Eres. Solo el
ego te hace creer esto. Como he dicho también, remonta en tu memoria hasta tu
más tierna infancia. Trata de encontrar los primeros momentos en que tú has
perdido ese Absoluto. Pero el Absoluto siempre ha estado ahí. Sois vosotros los
que habéis creado una distancia, como yo mismo he creado una distancia a través
de una búsqueda, una ascesis. Es cuando desapareces en el sueño, que el
Absoluto está ahí. El contrato de alma solo concierne al alma. ¿Has visto ya a
un alma? Dame la prueba del ama. El Absoluto no tiene necesidad de prueba y no
es una prueba. Es lo que siempre está ahí. Lo que yo he llamado centro en cada
Centro, en cada punto. Mientras que tu punto de vista sea parcelario,
dependiendo de tu historia, de una suposición de ama, de un supuesto contrato,
de una supuesta persona, tú no puedes ser lo que Eres. Porque tú te sitúas tú
mismo, según las leyes. El Absoluto no está concernido por ninguna ley.
Pregunta: ¿hay una
forma de aburrimiento en el Absoluto? me gustaría comprender.
No hay nada que comprender. Precisamente, mientras
que trates d comprender, no puedes ser lo que Eres. Porque partes de una
suposición o de una pregunta preguntándote cuál es el sentido de todo eso. Es
un problema de perspectiva y de punto de vista. Mientras que te quedes en la
persona, mientras que te quedes en el “yo” que crees ser, no puede haber ningún
Absoluto. Por tanto es eso que tú Eres. Hablo de cambiar de punto de vista:
pienso que es la frase que he repetido más desde que intervengo. Cambia de punto
de vista y, después verás por ti mismo. Pero si permaneces en el mismo lugar
para intentar comprender lo que Eres, no podrá nunca. Abandónate, no
reflexiones más, y verás tú mismo. Pero mientras que permanezcas ahí donde
estás (sea en el ego o en el Sí), con una necesidad de referencia, de
comparación, de comprensión, de definición, permaneces en lo efímero. Tú
quieres hacer jugar la conciencia, aun extremadamente ampliada, para comprender
lo que no puedes comprender. Cambia de emplazamiento, de perspectiva, de punto
de vista y eso te aparecerá claramente. Es por eso que yo hablo de sueño. La
manifestación reemplaza a la conciencia. La expresión de la manifestación
reemplaza a LA FUENTE. El soporte de cualquier manifestación es el Amor. Pero
tú no puedes ser la manifestación y tomar conciencia del soporte que Eres. Es
un problema de punto de vista y de perspectiva, y no una ecuación que resolver,
ahí donde estás. Tú puedes dar vueltas durante miles de años, al
cuestionamiento, leer todo lo que quieras sobre el Absoluto, pero no te
acercarás jamás, mientras que reflexiones. Solo el abandono de Sí, que algunos
han alcanzado (a través de las expresiones que se os han comunicado: Infinita
Presencia, Absoluta Presencia, Última Presencia. Poco importa, son simplemente
estados de la conciencia que se manifiestan antes de su propia desaparición),
os lleva por tanto, al Absoluto y a la conciencia. Pero si tú permaneces todo
el tiempo en tu conciencia, no percibirás nada. El Absoluto contiene la
conciencia y LA FUENTE. Pero el Absoluto se revela desde el instante en que la
conciencia no está ya. Por supuesto, estando en una forma, cuando se vive esto,
no hay ninguna duda posible. Toda interrogación se hace estéril. No hay ya
ningún sentido que buscar, no hay reacción que manifestar, ni capitulación en
relación a su propia vida, sino simplemente ver las cosas desde el Centro,
habiendo cambiado de punto de vista. En ese momento, no podrás dudar jamás, un
segundo de lo que ha pasado. Y toda la conciencia, toda tu vida (aun
manteniendo esta forma), no tendrá jamás la misma coloración, ni el mismo punto
de vista. Es siempre el ego el que busca, es siempre el Sí el que se mira a sí
mismo pero no es el Absoluto. Solo la conciencia puede encontrar un
aburrimiento cuando no lo ha vivido. Pero desde que la conciencia desaparece (y
tú constatas que hay algo que no es del orden consciente, volviendo a la
conciencia), entonces la conciencia es diferente, no antes. Todo esto se une al
miedo. El miedo de desaparecer, el miedo del fin. El miedo de no saber, de no
entender, de no comprender. Esto solo concierne definitivamente, a la persona,
al ego y al Sí.
Pregunta: ¿vivir el
despliegue de la Gracia, permite ser Absoluto?
El despliegue de la Gracia os conduce al último
estado posible. Pero el sacrificio de la conciencia, sois vosotros los que lo
realizáis, nadie más. El Absoluto no es el despliegue de lo que sea. El
Absoluto no resulta de una práctica: resulta simplemente de un abandono total
del Sí. Es la condiciónsine qua non para que la Onda de Vida se lance, recorra
el conjunto de los sacos efímeros. En ese momento, tú eres Absoluto, lo que has
sido siempre. Existen muchos ejemplos. He tomado el del teatro. Vosotros podéis
tomar ese de la cebolla, que ya he dado. Podéis tomar el ejemplo de la cuerda
(que he dado) que se toma por una serpiente. Todo esto solo son juegos de
apariencia, proyecciones fuera de lo que tú Eres. Mientras que esto exista,
mientras que tú creas depender de un elemento llamado exterior o Interior, vas
por un camino falso. Precisamente cuando todos los elementos, exteriores e
interiores desaparecen, es cuando tú eres Absoluto. Existe un estado antes del
Absoluto donde la conciencia pierde sus referencias. No sabe ya donde está, en
qué cuerpo está. Se duerme. Ahí, tú eres Absoluto. Tú Eres. Pero desde el
instante en que en tu cabeza, tú piensas que esto o aquello va a establecer el
Absoluto para ti, te equivocas. Y por otra parte, puntualizo que en el espacio
en que algunos buscan una cuestión, como observáis, ese tiempo se alarga.
Aprovechad esos espacios en que el tiempo se alarga, para salir del tiempo. Así
pues, más allá de las palabras y de mis respuestas, más allá de vuestras
cuestiones, los espacios de silencio van a acercaros a ese último estado. Pero
no aprovechéis para dormiros totalmente.
Pregunta: ¿qué es el
Absoluto cuando se pasa la Puerta Estrecha?
La Puerta Estrecha (que está en resonancia para
vosotros, según las enseñanzas de los Ancianos), corresponde, como han dicho
ellos, a la Crucifixión y a la Resurrección: es la última etapa, es la Infinita
Presencia, es el Último Pasaje. Después, solamente abandonando el resultado de
esta Resurrección, entonces eres Absoluto.
Pregunta: habéis
dado muchas claves para franquear la Puerta Estrecha, pero la cerradura parece
muy complicada.
Pues, olvida todo eso. Considera que no hay ni
Puerta, ni cerradura, ni llave. Yo añado que no hay nada más simple que el
Absoluto. Solo la persona es complicada.
Pregunta: ¿la
vivencia de la Infinita Presencia establecida, solo el Abandono de Sí permite
el Absoluto?
Sí.
Pregunta: ¿el
Absoluto es el único estado en que se puede estar a la vez Presente a sí mismo
y olvidarse de sí mismo?
Pero el Absoluto no es un estado. Mientras que
consideres que es un estado que pienses alcanzar, eso no puede ser. He
calificado el Absoluto de Estado, más allá de cualquier estado. No es por
tanto, un estado: es la Naturaleza. Es lo que siempre has sido, lo que serás
siempre, con conciencia, sin conciencia, con cuerpo, sin cuerpo.
Pregunta: ¿aunque se
sepa que no hay objetivo, cuál es el fin de un Absoluto sin cuerpo?
¿Quién plantea la cuestión? ¿Qué es lo que en ti,
plantea esa clase de cuestión? Tú has entendido que el Absoluto no es un fin, y
cuando menos, intentas asignarle un fin. ¿A qué juega tu conciencia? Mientras
que reflexionas así, no te ocupas del Absoluto. Lo que pone los pies: es la
persona. Ninguna persona es Absoluto. No es un lugar donde se entra y se sale.
No es un lugar. No es un espacio. Solo tú puedes Vivirlo. Pero mientras que
pongas a la persona delante (con una necesidad de sentido), tú no puedes Ser
Absoluto. Creer que porque entiendas algo del Absoluto te permitirá avanzar, es
un error total.
Pregunta: ¿cuándo
durante el día, hay momentos en que el tiempo no existe ya, significa que el
Absoluto se revela entonces?
El Sí, él mismo, no conoce el tiempo. La
desaparición del tiempo nada tiene que ver con el Absoluto, sino con la
Infinita Presencia (eso que uno de los Arcángeles llamaba HIC y NUNC). Daos
cuenta de que todos los pensamientos que formuláis, de una manera general (no
hablo de aquí), desde el instante en que decís, por ejemplo: « me va a faltar
dinero o, tengo miedo de que me falte dinero”: no estáis ya ahí, no estáis en
el instante presente. ¿Acaso en el instante presente, ese dinero os falta?
Entended bien los mecanismos del pensamiento y de la conciencia: siempre están
fuera del tiempo presente exceptuada la Infinita Presencia. Tú puedes detectar
el Último Estado, cuando te duermes o cuando el ego dice: “estoy medio
presente”. Acuérdate que cuando realizas lo que Eres, la cuestión del Absoluto
no puede ya plantearse: es una evidencia. Y es, por otra parte, tan evidente,
que no puedes comprender la dificultad del otro. Pero acuérdate: el Absoluto
procede de la refutación de lo efímero, de la encuesta, que apunta a mostrar lo
absurdo de la persona. Mientras estimes que tu persona debe ser la sede de tu
conciencia y del Amor, te equivocas.
Pregunta: me he
visto a la vez, actor de teatro, observador, teatro y en el exterior del
teatro, sintiendo un gran desgarro de Amor y de dolor. ¿Qué era?
Eso concierne a la deslocalización de la
conciencia, el fin de la separación, la Unidad de la conciencia, pero no al
Absoluto. Ser Absoluto, es el momento en que incluso todo esto, desaparece. El
Absoluto no es una experiencia. La experiencia mística se sitúa en el Sí. Sea
cuál sea la belleza de la experiencia, sea cuál sea la belleza de la conciencia
que lo vive: esto no es Absoluto. La trampa (y muchos han comprobado, esa
trampa), es creer que, porque veis la Luz, o que porque vuestra conciencia no
está ya encerrada en este cuerpo, que habéis llegado. No solamente no habéis
llegado sino que para el Absoluto, desde ese punto de vista, os habéis alejado.
Es la conciencia la que buscará siempre la experiencia. Pero reflexionad dos
segundos: ¿bastan esas experiencias para vivir de otra forma? Si una de esas
experiencias fuera suficiente, no habría más experiencia. Daros cuenta de que
lo que se expresa (por vosotros como por mi), es una distancia, falsa, con el
Absoluto. La experiencia concierne a la conciencia, como la manifestación. La
experiencia no Libera. Os hace realizar un objetivo: el Sí. Pero, recordad que
en definitiva, vosotros Sois todos, Absoluto. Estad seguros, lo viváis (o no),
no cambia absolutamente nada el negocio. Pero ninguna cualidad de conciencia o
de experiencia es Absoluto. Que tú Fusiones con un insecto, que tú Fusiones con
un sol, con un Hermano, con una Hermana: es una experiencia. Es la conciencia
que está en marcha. Solo el que Es Absoluto entiende perfectamente lo que se
juega en la conciencia, como en la a-conciencia. Pero el que permanece en la
conciencia no puede ni hacerse la mínima idea, de lo que Es.
Pregunta: ¿es exacto
que la repetición de las experiencias de Fusión lleva al Absoluto?
Eso os lleva a la Infinita Presencia. Queda vivir
el Sacrificio Último. Pero la conciencia, misma (esté separada o en el Sí),
solo tiene un miedo: es su propia cesación. La cesación de la conciencia, en
este mundo como en cualquier mundo, solo tú lo puedes realizar: es un Sí a Sí.
Las Fusiones, la Gracia, la Onda de Vida, mientras que no son transcendidas y
mientras que la Onda de Vida no ha ascendido, no hay Absoluto, porque la
conciencia permanece. Es precisamente, el momento en que no tenéis ya nada, el
momento en que sobreviene la desesperación y la angustia, cuando tú Eres
Absoluto, pero no antes: hace falta que la conciencia haya gastado todos los
cartuchos. Y, por otra parte, te recuerdo que los Ancianos, como las Estrellas,
os han aportado sus testimonios de visión, de vida. Os han dado a ver, a tocar
con el dedo, las condiciones de la Infinita Presencia y, yo diría, una especie
de condición previa, al Absoluto. Ciertas Estrellas os han evocado lo que se ha
llamado: tensión hacia el Abandono. Pero la tensión hacia el Abandono, no es el
Abandono. Es el momento en que la conciencia considera que no hay otra salida
que sacrificarse ella misma. Es por eso que el Absoluto que tú Eres es una
madurez y no una maduración. Es en el momento en que viene el miedo de
desaparecer, cuando hace falta osar desaparecer. Pero tu conciencia no puede
desaparecer por sí misma, ni por voluntad, ni por cualquier experiencia. El
despertar de la Kundalini, la recepción de la Shakti no es nada. Solo el Sharam
Amrita confiere la Liberación. Pero tú no puedes buscar el Sharam Amrita.
Aparece cuando tú desapareces. Las condiciones previas, si se las puede definir
así, se os han dado de múltiples formas. El testigo formal (manifestado pues)
del Absoluto que Sois, es Shantinilaya. El testigo es Sharam Amrita. Pero no
sois vosotros.
Pregunta: ¿por qué
sugerirnos salir del tiempo en los espacios de silencio?
Salir del tiempo requiere ya, tomar conciencia del
tiempo y de los tiempos. Para completar lo que yo decía antes, si tú te sitúas
Aquí y Ahora, plantearse la cuestión de una carencia, de un dolor, plantearse
la mínima cuestión, hace desaparecer el Aquí y Ahora, pero no a ti. La
conciencia del instante presente instala el Sí, pero hay aun un tiempo que es
el tiempo presente: de ese también debes desaparecer. No por la acción de la
conciencia o de la voluntad, sino por la desaparición. Es lo que precede muy
exactamente, el instante en que te duermes, o el instante en que te despiertas.
Es la Infinita Presencia. Salir del tiempo, es identificar el tiempo y los
tiempos, ver los engranajes que te hacen salir del instante presente,
instalarte en el instante presente y desaparecer. Terminaré entonces por lo que
yo llamaría los consejos. Localizad el instante que vivís, en que flotáis, en
que comenzáis a zozobrar. Olvidad el cuerpo. Olvidad esta conciencia. Olvidad
las percepciones. Olvidad el tiempo. Y de un golpecito, emitid el pensamiento,
no de rendiros, no de desplazaros, sino pensad simplemente en lo que tocan
vuestros pies, sin definirlo. Porque lo que se llama el Éter de la Tierra, está
ahí. No busquéis definir o percibir lo que sea, haced simplemente eso.
Hagámoslo juntos, sin cuestión. En nuestros próximos intercambios y
entrevistas, podré volver. Hagamos esto. Primero el silencio. No es una
meditación. No es una observación.
Y bien, ahora BIDI os saluda. Y os digo hasta la
próxima entrevista. Hasta pronto.