“Estamos
encendiendo la noche” - 18 de Octubre de 2012
[...] Es un
momento muy fuerte de ajuste y de transformación. En este momento en que la
energía del Rayo Cobre está entrando ya por fin en vuestros planos, la Energía
Femenina está emergiendo y la Energía Masculina interiorizando.
Se está
produciendo la armonización de los polos.
Vuestras hebras
del ADN ya están reprogramadas y se están reactivando por fin. El proceso, no
obstante, tomará un tiempo, el tiempo desde el paso del portal 10:11:12 hasta
su culminación en el Solsticio de Invierno. Este próximo Solsticio de Invierno
es más que un simple solsticio de invierno: es el Solsticio de vuestro largo
Invierno, de vuestra larga Noche.
Cada vez tenéis y
recibís más información de nosotros, cada vez las compuertas están más y más
abiertas, pero ahora mismo os parece que no podéis procesarla o integrarla. Os
sentís como aturdidos, como en modo de espera, en proceso de algo que no sabéis
muy bien qué es ni a dónde lleva.
Lo que ocurre es
que a medida que las compuertas se van abriendo poco a poco, va incrementándose
el nivel lumínico en vuestro plano y en vuestros cuerpos. A medida que el nivel
lumínico aumenta, vuestras hebras dormidas reprogramadas con los nuevos códigos
se van reactivando una a una.
Ahora mismo se
sienten como si vosotros mismos fuerais una de vuestras máquinas cuando las
ponéis en marcha. Cuando le das al botón de arranque o encendido a una de
vuestras máquinas, toma un tiempo indeterminado, más bien breve, en que la
corriente eléctrica empieza a circular por el aparato y a alimentarlo y todos
los pilotos y circuitos se activan convenientemente.
En ese período de
tiempo indeterminado, pero breve, la máquina está “aparentemente” inoperativa,
en el aire. Podríamos decir que es exactamente lo que os está ocurriendo a
todos vosotros y lo que estáis sintiendo con el aumento del nivel lumínico en
vuestros cuerpos a medida que las compuertas que han separado durante largo
tiempo vuestro mundo del nuestro se van abriendo.
El nivel lumínico
es cegador y aumenta exponencialmente a cada milímetro que avanza la apertura
de compuertas. Y ello provoca un movimiento electromagnético en vosotros muy
severo, tan severo como el que experimentan vuestras máquinas en el proceso de
encendido.
Queridos
hermanos, amados todos, el cobre es el más importante conductor. Por fin
vuestra biología y vuestros campos sutiles están lo suficientemente preparados
para que este maravilloso y potente Rayo opere en vosotros y en vuestra
realidad circundante y manifiesta. Estáis y estamos encendiendo la noche,
amados, porque por fin, ya está amaneciendo.
La noche ha sido
muy larga, miles de años, pero el tiempo de los velos para el Planeta Azul ha
llegado a su fin.
Estáis
amaneciendo, amados, y estamos asistiendo emocionados a tan importante acontecimiento
cósmico. Cada nuevo amanecer en cualquier rincón del Cosmos es celebrado con
gozo, porque la familia crece y la Armonía se expande.
El amanecer es un
relativamente breve momento, por comparación a la larga duración de las horas
de oscuridad precedente. Y ese breve instante, decisivo, determinante, es
irreversible e imparable -debéis ser plenamente conscientes de esto-, y en
pocos instantes el mundo cambia y se transforma completamente y se hace la Luz
en todo su esplendor.
Y el Día que
comienza para vosotros es igual de largo que ha sido vuestra Noche -también
debéis ser plenamente conscientes de esto-, así que sólo podéis celebrar
gozosos este acontecimiento personal, colectivo y planetario.
Debéis tomar
conciencia de que vuestra Noche ha sido larga y que por ello, el Nuevo Amanecer
supone en vosotros un fuerte cambio y una fuerte transformación. Nosotros somos
plenamente conscientes de esto y por ello os estamos asistiendo amorosamente y
os abrazamos y os cogemos de la mano a todos aquellos que nos lo pedís desde el
corazón.
Sabemos que el
aumento lumínico está provocando en todos fuertes sacudidas, aturdimiento,
ceguera, distorsión, y que ver todo lo que la Luz os va mostrando ahora os
parece poco amable. Pero esto es un mero trámite, amados, porque el Día,
vuestro Nuevo Día va a lucir hermoso y vamos a poder disfrutar de ello todos
juntos.
Ahora sólo debéis
confiar y permitir que la corriente energética, electromagnética y lumínica
recorra vuestros cuerpos sin oponer resistencia. El proceso de encendido es un
mero trámite. Estáis despertando de un largo sueño reparador, aunque muchos
sintáis que vuestro sueño ha estado repleto de pesadillas.
No os resistáis
al proceso de “despertar”, no opongáis resistencia, no luchéis en contra. A
algunos más que a otros os costará pasar del estado de letargo al estado de
plena conciencia, como unos niños les cuesta más despertar que a otros, como
unos niños que prefieren hacerse los remolones.
Otros niños se
resisten a aceptar los ciclos y a aceptar que la vida consiste en soñar/dormir
y vivir/estar despierto, pero es una lección que tarde o temprano debe ser
aprendida en el no-tiempo, porque lo cíclico impera y rige nuestros planos.
No os resistáis,
amados, al proceso. Si oponéis resistencia, si existen en vosotros dobleces, es
cuando se incrementan los “cortocircuitos” y el proceso puede tornarse incluso
doloroso, cuando puede ser en realidad mucho más ligero y liviano.
Estiraos,
desperezaos, alinead vuestros centros y vuestros cuerpos ante el primer sol de
la mañana.
Abríos a la luz
y, cuando el proceso culmine, y eso va a ser muy pronto, cuando las compuertas
se hayan abierto completamente y hayan desaparecido, sólo veréis un campo
multicolor de hermosas y radiantes flores y sólo sentirán ya que están rodeados
de Amor y Belleza.
AA. Uriel – 18 de Octubre de 2012 – “Estamos
encendiendo la noche”, canalizado por Hester Aira