Es tiempo de vernos a los ojos, los ojos no mienten.
Quitar el velo es a través de un trabajo de consciencia que te vas
volviendo más transparente y con ello los ojos van reflejando el trabajo
realizado.
Por eso se dice que son las ventanas del alma.
Quién miente o manipula, aun tiene un velo en el ojo, se ve opaco y
no puede trasmitir la luz que habita en su alma.
Comienza a ver más a los ojos, reconoce con quien hablas y con las
personas que frecuentas, eso te indicara que es lo que en realidad buscas.
El decir es fácil, pero el trabajo interno es un camino que se
necesita valor para enfrentarlo.
Porque en el debe decirse la verdad y ser integro, no cualquiera lo
desea.
Es por eso que ser espiritual no es cosa de religión, sino de ser
la luz que habita en tu interior.
La voluntad es el signo de la fortaleza que tienes para limpiarte
desde el interior.
Todo el que ha ido limpiando su mirada sabe de este trayecto, pero también
sabe que es un estado de consciencia ganado en un esfuerzo de días.
No se necesita decir si meditas, haces contacto con tu interior o
eres buena persona, el anuncio de todo lo que eres se ve en la mirada.
Cuando una persona se está volviendo una persona triste se va
notando en su mirada, al igual si miente o manipula.
Nada está fuera de la verdad de tu mirada.
Aun los ojos claros pueden parecer opacos a la falta de esta luz.
Es gran trabajo el realizado para ser coherente con lo que dices,
haces, sientes y amas.
Es pulir el alma, eso es un ojo transparente como un espejo, en
donde te puedes reflejar.
En la mirada se refleja tu sentir.