Hermosa y
linda alma la que nos proporciona la vida.
Alma, que
con tu presencia caminamos desde la misma existencia.
Alma,
regalo divino que emana la luz de su propio creador.
La fuente
es la misma, es el amor.
Alma, que
sin ti no podemos existir.
Alma, que
al sentirte y reconocerte, le doy otro sentido a mi existencia.
Alma, que
al saber de ti me transformo gracias a tu existencia y divinidad.
Alma, que
me acompañas en cada pensar humano o divino, depende de mí ese pensar.
Alma, que
tu brillo es como un sol o una luna o hasta te puedo eclipsar si no deseo que
brilles.
Alma, que
me amas y acompañas, me dé cuenta o no.
Linda alma
que eres el soplo divino de la misma creación.
Y a través
de ti yo puedo realizar mis creaciones y atraer a mi existencia lo más grande o
lo más pequeño.
Que con tu
existencia soy parte del universo.
Chispa divina
que me regalo mi creador al transformar el amor en el alma que soy y existo.
Por ello
alma, sé que mi esencia es amor a pesar de mi humanidad, pues ella, mi
humanidad es un laberinto de pensamientos.
Cuando logro
calmar mi humanidad, me doy cuenta de mi divinidad, por ello en ese
reconocimiento sé que todo lo vivido lo he creado yo.
Alma hermosa,
regalo divino, guíame por senderos calmos, hermosos, abundantes y llenos de
recuerdos en el amor de Dios.
Alma mía,
que mi existencia sea el reflejo de tu existencia.
Que sea el
amor perfecto que Dios me regalo.
Que me dé
cuenta de todo lo que soy y existo.
Por eso
alma siempre está presente en esta vida tan humana y divina a tu lado.
Alma, luz
de mi existencia.