miércoles, febrero 05, 2020

Esta es la forma desembrar y cosechar.



Así como siembras la tierra para cosechar lo deseado, del mismo modo siembra en tu mente aquello que deseas cosechar, por medio de tu amor e imaginación, y como toda semilla necesita ser regada. La de la tierra le vertiras agua y a la del pensamiento, unos minutos de tu atención y sensación de realidad. Cada una deberá ser regada a su debido tiempo, la de la imaginación deberá ser a diario, sin que la mente interfiera, sólo así dará sus frutos.