Cuando nacemos en este mundo, también nace el trabajo que
venimos a realizar.
Es el aporte que darás a la humanidad con tus acciones,
enseñanzas y proceder en cada situación.
Y cuando te vas, ese es el legado que dejas.
No es tanto la cantidad de dinero, generado o gastado.
Es lo que dijiste, actuaste y sobre todo sentiste en el
trabajo que realizaste.
Si cada mañana despiertas, estas realizando un trabajo,
remunerado o no.
Ese es tu aporte al mundo.