Sir Nicholas Winton es el hombre que salvó a 669
niños judíos de la muerte a manos de la Alemania nazi justo antes del inicio de
la Segunda Guerra Mundial en 1939. Al ver la situación en los campos de
refugiados de Praga, canceló sus vacaciones y comenzó una aventura para sacar a
los niños del país. Creó una oficina improvisada en la habitación del hotel en
la que se encontraba y trabajó por conseguirlo. Las familias le visitaban para
poder incluir a sus hijos en la lista, hasta llenarla con 669 nombres.
Una vez conseguido, Winton tuvo que hacer frente a
un gran problema: conseguir la financiación necesaria para pagar los costos del
viaje en tren de los niños desde Checoslovaquia hasta el país de acogida y
encontrar a personas que aceptaran hacerse cargo de estos chicos y pagar las 50
libras que reclamaba el gobierno. Winton comenzó a publicar anuncios en los
diarios británicos, en las iglesias y en las sinagogas solicitando ayuda. La
respuesta de los londinenses fue entusiasta. En unas semanas, centenares de
familias aceptaron acoger a los niños y aportaron el dinero necesario como para
iniciar los transportes desde Checoslovaquia hasta la capital inglesa.
Es este acto homenaje, el no esperaba encontrarse
con los niños que salvó, mira su reacción cuando se da cuenta.
Fuente:Wikipedia