Siempre en
la vida una de sus características son los encuentros y desencuentros, en donde
muchas veces al conocer a una persona sientes en ese mismo instante que ya la
conoces de hace mucho tiempo, y los diálogos y conexión son tan reales que no
deja duda a que en alguna vida has estado ya acompañada de esa persona. Pueden ser parientes, hijos, amigos, parejas, en cualquier relación puede surgir.
A veces
esos momentos son necesarios para arreglar algo inconcluso o bien para seguir
una historia por la que se deseaba seguir acompañado o acompañada de ese ser
que es tan grato en la vida presente.
En algunas
circunstancias las almas permanecen y en otras se alejan por algún motivo, que
a veces es conocido y otras tantas desconocido, pero, sin duda alguna siempre prevalecerá
el amor en el caso de que ese encuentro con esa alma haya producido el efecto
de haber conocido el amor a través de esa compañía.
Eso se
debe a que el amor es la fuerza que existe dentro del corazón y los lazos de él
jamás se podrán romper, deteriorar u olvidar, porque al ser el amor una fuerza
y energía que trasciende todas las barreras de cualquier estado humano, las
almas se seguirán reconociendo en los lugares en donde se encuentren.
Por todo
eso si tú tienes o has tenido alguna de estas relaciones basadas en el amor del
alma, no dudes que los encuentros y reencuentros en los lugares en donde ambas
almas transiten, su reconocimiento seguirá siendo evidente a la luz de la
consciencia. Esta es una de las grandes características que posee el alma y el espíritu
en el trayecto de regreso a Dios, que es y será la última morada de los múltiples
viajes que tiene la consciencia durante su existencia por el universo.
Es por eso
que si dentro de ti se ha reconocido esa fuerza llamada amor con otro ser
humano, es por ello que podrás reconocer y sentir más de una vez el encuentro
con ese ser querido, al conocer esto sabrás que nunca dirás adiós sino un hasta
luego o un hasta la próxima, con la dicha de volver a compartir.
Y si
sigues con esa persona con la que tu alma reconoció la conexión, no olvides de
disfrutar cada momento, porque es aquí y ahora, en donde se vuelve a disfrutar
una de las tantas veces en las que se encontraran, recordando que el amor es la
que hace que las almas no olviden todo aquello que nació de su fuente, por ser
este, el amor, único medio para obrar milagros, encuentros y alegría en la vida
de cada uno que lo vive.
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